Maldita sea… me siento muerto, cómo si todo lo que pudiera existir dentro de mí no existiera… mentiras, mentiras que me dije a mi mismo para no desarmarme con tu lejanía… y siento… siento que no siento, y que he tratado de sentir sugestionándome y engañándome, porque lo cierto es que no siento… no… si siento, pero al hacerlo me ignoro… desvió y oculto esto, maldita sea… me siento podrido… por dentro, al saber ahora, sólo ahora que este corazón late, que siempre lo ha hecho… y que me negué estúpidamente a creer que lo hacía… Miedo, mi odiada palabra favorita, y no dejo de pensar que tal vez la he usado cómo excusa… si inventé una vida hasta ahora, ¿porqué no este miedo? Quizás me es más cómodo ser nada a ser algo…
Seis meses… más, posiblemente años en los que entré a este modo de espera… monotonía irreversible… puta, puta sea esta sensación de esclavitud y la mierda que guardo… odio tanto saber que miento, Mentiras! siempre me engañé y traté de creer que todo marchaba según el plan… nunca supe nada, nunca… ni siquiera cuando sentía que con sólo desearlo conseguiría lo que quisiera…
Me enamoré… y tuve que romper mi mundo para darme cuenta… no sabes lo difícil que es hacerme llorar, y aún así lo conseguiste… maldito sea al haberme negado el sentir… y cuando veo tu rostro en lágrimas, cuando siento tu dolor en mi pecho, mierda, no sabes cuanto me odio por no decir "te quiero" y llorar junto a ti…
Y odio, odio más que nunca sentirme satisfecho al saber que te puedo hacer sentir mal a gusto y que estarás a mí lado, cual marioneta sin voluntad… odio ese poder, odio tener tu vida y destruirla y que sigas tan sumiso y dispuesto a perdonar, LO ODIO…
Realmente odio justificar mis acciones, ¿!acaso no eres el hijo de puta que dice que nunca se ha arrepentido!? SÍ, LO SOY… y me odio más por decirlo y, mierda, no hacerlo… me odio y me siento mal… toda la ira que se escapa esta noche mientras escribo… y desearía escribir hasta acabar el mundo, diablos, me siento tan libre… por ser honesto al menos esta vez… cielos… te amo tanto… te amo desde siempre… y al principio no fue real… sufrí cómo nunca cuando me di cuenta de lo que realmente sentía por ti, más aún sabiendo que te amaba de una manera especial, por que nunca, nunca se me habría ocurrido amar a alguien cómo lo hago ahora contigo…
Al puto infierno con las metáforas, hoy no tengo ganas… sólo quiero dejar a mis manos escribir desde mi mente al teclado… y decir que Al no existe, MALDITA Y PUTA MENTIRA, la más grande que he dicho… "AL esto, Al lo otro"… he sido un sucio cobarde… Al no existe, no existe porque yo soy Al… deja de culparte diciendo que soy tú… no eres nada excepto yo… "Al es el que piensa, tú el que sientes"… ahora me río de mi estupidez… y es que estúpido es lo que más he sido en este tiempo… se siente bien… realmente bien poder escribir esto…
Me siento decadente, pero lúcido… y es justo ahora que lo digo y lo siento… no me arrepiento de nada… hay mucho que hubiera querido que no pasara, o que se hubiera dado de otra forma… especialmente contigo...
Siempre quisiste saber lo que pasaba conmigo… y yo dejaba pasar los días sin responderte… fui irresponsable… un verdadero hijo de puta… me justificaba… ¿ACASO NO PIENSO? Dar excusas es realmente patético… y lo hice… una y otra vez... y no dejaré de hacerlo… no porque quiera, sino porque no puedo negar lo que soy en esencia… un miembro más de ese grupo de mierda sin sentido… una estúpida máquina, cómo esas que odias… y te quiero… te amo más de lo que creo…
Te amo y te amé tanto, que busqué amar a otros cuando sentía que a ti no podía amarte… ciego, fui ciego… siempre estabas y no te veía entre todos… de alguna forma así logré amar al resto… y recuerdo haberlo dicho una vez… que gracias a ti pude sentir amor por alguien más… me regalaste esa capacidad… o, si lo pienso de otra forma... busqué un reemplazo en cada persona que encontraba mientras estabas lejos… no me arrepiento, no lo hago, porque gracias a eso descubrí a personas que jamás podría olvidar…
Cómo a ti, que estuviste conmigo cuando estaba triste… me acogiste cómo a un hijo… y te quiero como si fueras mi padre… oh, siento tantas ganas de abrazarte… y me alegro por saber que aún estando tan lejos me quieres… y que te quiero… y me aborrezco, por pensar más en mí que en ti… nunca estuve tan mal cómo para dejar de pensar en los demás y dedicarme sólo a mí… egoísta, fui egoísta… y sentía placer al hacerlo… por eso no cambié, hasta ahora…
Estaba desesperado, atrapado y devorado por nada… te amaba y tú dejabas de hacerlo… me sentí tan solo… y apareciste en medio de eso… para aullar junto a mí… me siento culpable… y no quiero pensar que te amo tanto sólo porque apareciste cuando lo único que quería era renunciar… te amo, te amo también… mucho más de lo que debería hacerlo… nunca lo suficiente cómo para desplazar a la luna, pero te amo…
Demonios, esto se siente tan extraño… tanto tiempo sin sentir que latía… que respiraba… aquí estoy, mierda, aquí, justo frente al mundo… estoy, tan mal y tan bien… porque existo… simplemente existo…
Se acabó, este sueño del que no quería regresar… estaba tan tranquilo en esa esfera de contradicción, sin darme cuenta de lo mucho que sufría, de lo grandioso que es estar vivo… de amarte sin que me ames… escapé, luego de saber que lo nuestro se terminaba… y es que si hubo un nosotros, uno que jamás negaré… lo sentí así, y lo siento así… no fuiste solamente tú… fue un sentimiento que compartimos…
Puedes odiarme con libertad, si sientes que hay motivos aún para hacerlo… ya no importa…
No me siento sólo… y se siente bien…
Jamás dejaré de amarte, jamás… y escribo esto sin pensar en lo que pensarás, ni en lo que sentirás… sólo lo hago, algo tarde, muy tarde…
Te amo… y trataré de iniciar mi vida justo en el momento en el que la dejé suspendida… me siento vacío, muerto y apagado… pero dentro siento también algo tibio… ¿esperanza?... ni idea, tampoco me interesa saberlo… sólo me importa entender que eso me hace avanzar, soltar las cadenas que me ataban al sufrimiento que inventé con tu nombre… te culpé… y no me di cuenta hasta ahora que quién me cortaba en dos no eras tú, sino yo sosteniendo tus manos…
Mientras siga lúcido… mientras siga siendo yo… podré decirlo sin mentir… te amo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario